Fue su primer destino tras ser ordenado sacerdote en pleno preconcilio, cuando tan solo contaba 25 años.
Tal y como nos cuenta Luisa García, que le acogió como pupilo en su casa, de aquí a Valladolid donde ocupó varios cargos: director Colegio Mayor, profesor del Seminario, profesor de instituto, ecónomo de la parroquia San Miguel de Valladolid, etc. y tanto allí como aqui se ganó a todo el mundo. Era muy espiritual, contagiaba santidad. Ha cuidado mucho de sus hermanas, tocándole hacer de padre y madre. Ha dejado una vida larga de contar y que sin duda le ha llevado al cielo.
No hace mucho presidió una Misa Funeral, de Mercedes, en nuestra parroquia. Y mucha gente le saludó con alegría de volverle a ver, después de tanto tiempo. El gran predicador, con una palabra que era hueca y sonora, convincente, de Dios.
La capilla ardiente estará en el tanatorio de las contiendas y el funeral será mañana jueves, 15 de septiembre, a las 16,30h en la iglesia de San Miguel de Valladolid. Y acto seguido al cementerio de Montealegre.
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