domingo, 18 de abril de 2021

WAKE UP! FEST

El próximo 8 de mayo, sábado, la delegación de familia y vida en colaboración con pastoral juvenil y el Seminario Diocesano.... celebraremos las Jornadas de Familia, este año dirigida a los jóvenes... con el lema de WAKE UP! FEST.

Desde sus canciones, sus bailes, su estilo, queremos que los jóvenes vean cómo también es posible llegar a Dios, alabarle... para ello contaremos con la colaboración de Grilex, rapero cristiano, y de Impact; que causarán gran impacto entre todos los jóvenes y los no tan jóvenes. 

Con los padres, tendremos talleres de gran interés para todos.
También contaremos con un bocata solidario a favor de la Fundación Red Íncola, un campeonato de fútbol y finalizaremos con un magnífico concierto de Grilex e Impact.
TODO CUMPLIENDO LAS MEDIDAS SANITARIAS RECOMENDADAS ANTI COVID19

 

lunes, 5 de abril de 2021

¡VIVA CRISTO REY! - LA PINAZA - Palabras de Uge

Querido Cristo Rey,

Un año más estamos contigo, a tus pies, celebrando de este modo tan especial tu día, tu Romería. Dando lo mejor de nosotros, brindándote nuestras jotas en el recorrido de tu procesión, sin acordarnos ni del cansancio arrastrado durante el día ni de los dolores que cualquier otro momento del año no nos dejarían mover.

Cristo Rey, aquí estamos, con todo nuestro cariño, pidiéndote tu intercesión por todos y cada uno de nosotros, rogándote por todos, pero de un modo muy especial por los que ya no están, quienes durante esta pandemia nos han dejado. Tal día como hoy todos representados en Chuchi, cabeza incansable a lo largo de su vida de tu procesión, portando la cruz, siempre con su sonrisa y esa alegría que le caracterizaba.. ”negociando” el recorrido entre los dos grandes bloques participantes: “EL cura y cofrades” y “la música y danzantes”, he de decirte que siempre ganábamos los últimos llegando hasta la raya, hasta dar la vuelta al cruzar el puente del Jaramiel.

Hoy, desde La Pinaza, hemos querido hacernos presentes representando a todo nuestro pueblo y a los pueblos vecinos, que con tanta alegría disfrutamos de tu Romería. Como bien sabes, este año,  tenemos prohibido celebrarlo de forma presencial, pero en Espíritu nadie nos puede prohibir acompañarte y estar a tu lado. Esperemos que al año que viene podamos disfrutar, con la mayor normalidad posible, de tu Romería. Permitiéndonos  celebrarlo a lo grande, que decimos los Iscarienses. Compartiendo con los amigos el día de campo junto a tu Ermita, y celebrando contigo, con dulzainas y jotas hasta caer rendidos, Tu procesión, para finalizar la tarde guardándote en tu Ermita, desde dónde nos observarás un año más.

sábado, 3 de abril de 2021

CARTA DE JESÚS

 


Querid@ amig@:

              Posiblemente me conoces, al menos de oídas; puede que me hayas visto en fotos, en carteles y hasta en alguna película; aunque en realidad no soy el de las fotos, ni el de los carteles, ni el de las películas. Sencillamente soy yo, Jesús; tu hermano, tu amigo.

           Vine al mundo hace más de 2000 años; ¡qué mundo me encontré…!: pobreza, opresión, miseria,… Cuando yo nací muchos hombres éramos pobres. Nosotros no teníamos nada; tan sólo un pesebre encontró José, mi padre en la tierra, para acostarme; yo no me acuerdo, pues era un bebé, pero sé que no era fácil vivir.

           Después, cuando iba creciendo, en la pequeña aldea de Nazaret, no me gustaba lo que veía; cuya máxima aspiración era ser poderosos, ser respetados, admirados… Los que predicaban no hacían lo que decían; y ¡vaya imagen que daban de mi Padre, de Dios…! Juez terrible, severo, exigente, rencoroso,… de forma que intenté abrirles los ojos; hablarles de un mundo mejor, el Reino de mi Padre, que había que empezar a construir aquí; de una vida distinta, en la que lo importante no es vencer, sino ayudarse; no es luchar, sino amar; no es juzgar, sino perdonar; no es mentir, sino ser sinceros y confiados. Intenté que viesen a mi Padre como yo lo veía: cercano, bueno, misericordioso; quería que se sintiesen amados. Pero menudo jaleo que montaron. Al principio venía mucha gente conmigo; éramos un grupo muy unido; pronto empezaron a perseguirme, a amanerarme de muerte, y muchos me dejaron.

                Aun así, hubo un grupo: pequeño, pero inmenso; sencillo, pero vivo; débil, pero imparable; mis apóstoles, mis amigos, que me acompañaron. Yo por mi parte no estaba dispuesto a callarme, de forma que seguí diciendo lo que creía, y seguí viviendo de acuerdo con ello, con los pobres, con los sencillos y con los que lloraban.

                Al final los fuertes pudieron más. Entre los jefes de mi pueblo y los romanos me acusaron de agitador, de hereje, de blasfemo, y me condenaron a muerte. ¡Qué mal trago! Cuando ya veía venir el final estaba aterrado, y sólo podía pedirle fuerzas a mi Padre. Me mataron, me clavaron en una cruz, pero yo veía que esa era la forma de demostrar que merece la pena dar la vida para salvar a mis hermanos.

                Muchos se preguntan: “¿cómo que salvar a sus hermanos? Mucho podía hacer desde la cruz”. ¡Claro que sí! Muchos creían que con mi muerte ya estaba todo solucionado, que me habían matado y era un peligro menos.

            Pero eso no fue todo. Resulta que lo que yo decía era verdad, era la Verdad, y después de tres días mi Padre me hizo resucitar.

         Por eso ahora estoy contigo. Desde entonces muchos hombres y mujeres me han encontrado y me han seguido; han vivido como yo; a muchos los mataron, como a mí; y todos han dado su vida de una u otra forma. Sabían cuál es la Verdad, el Camino que hay que recorrer, la Vida con un sentido…

         Quiero que tú también sepas esto: que estoy contigo, que te quiero, y que hay un camino que juntos podemos recorrer.

            Tu Dios y tu amigo:                                                    

                                                                                                                                                                                Jesús