El primer día del mes de mayo, mes de las flores, mes de la Virgen María, se lo hemos querido dedicar a ella, Nuestra Madre y la Madre de Dios. Ha sido un día muy alegre en el que nos ha acompañado hasta el tiempo. Algunos salimos de Íscar en bus, y otros muchos en sus coches particulares. La cita era a las 13,00h la celebración de la Eucaristía en este Santuario del Henar que tiene tantas connotaciones para todos nosotros. 
Una Eucaristía muy alegre, en la que hemos celebrado con devoción a "San José, obrero", esposo de la María, porque la alegría la manifestamos los hijos, cuando como hermanos, nos convoca la Madre para celebrar lo más importante: la Eucaristía. Los cantos, las plegarias, la Palabra, la Eucaristía, etc. nos ha recordado el tiempo que vivimos: la Pascua. 
Después de la Eucaristía, una visita a la Virgen, beso a su medalla, algunos deseos en su libro y después, a comer, que había hambre. La mesa ancha, muy ancha, tan ancha como la misma campa del Henar. Mesas y sillas con las familias de nuestra parroquia, que han sabido compartir lo mejor de ellas mismas.
Juegos y más juegos para los más pequeños, y no tan pequeños. Alegría y alegría.
Agradecemos a todas las familias que en un día como este de vacación y puente, lo que han querido celebrar junto a otras muchas familias de nuestro pueblo y parroquia. La verdad es que gracias a todos porque, en realidad, todos hemos contribuido a que este día fuera un gran día y hasta que brillara el sol.
Hasta la próxima, que será el 27 de mayo en el que celebraremos la marcha de Manos Unidas. Al finalizar podremos celebrar la Eucaristía en la Plaza Mayor del pueblo (si el tiempo lo permite) y degustar un "pincho solidario".
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